El combinado de Vicente del Bosque, que salió sin ningún delantero, empató ante la selección italiana después de igualar el gol inicial de Di Natale.

A toda la descolocación del equipo español, se le sumó la falta de posesión y de definición, ya que la táctica de jugar sin un número 9, no acabó de funcionar. A España se le hizo muy larga y difícil la primera parte del partido, dominada por Italia.
A la vuelta de vestuarios, España salió con más ganas y ganó iniciativa, dónde los más destacados fueron Andrés Iniesta y Cesc Fábregas, que estaba muy activo haciendo de falso 9.
En la segunda parte, empezaron a aparecer las ocasiones de gol por parte de España y se redujeron las distancias entre las dos selecciones.
Pese a esto, en el minuto 60' Di Natale, que había entrado en el minuto 55', marcó un gol que puso en cabeza a Italia. Después del gol en contra, el ritmo de la selección española no decayó y en el minuto 63', sólo tres minutos después del gol de Italia, Cesc Fábregas anotó un gol que ponía las tablas entre ambas selecciones.
Con el 1-1 en el marcador, Vicente del Bosque decidió realizar cambios: primero metió a Jesús Navas por Silva en el minuto 64' y luego a Fernando Torres por Cesc Fábregas en el 74'.
Los cambios beneficiaron al equipo español, que recuperó la figura del 9, aunque Torres cometió errores frente portería y no consiguió anotar el gol de la victoria para España. No supo acabar las jugadas que Navas le cedió y perdió en el uno contra uno frente a Buffon.
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